La terraza es un rincón clave de una vivienda: según sus características puede ser la reina del hogar, el lugar donde descansar, tomar el sol o disfrutar de unas vistas increíbles, o por el contrario caer en el olvido sin que sepamos aprovechar sus amplias posibilidades. Para que esto último no sea un problema y tenga el espacio que merece dentro de la vivienda, os enseñamos cómo decorar una terraza.

Potencia sus posibilidades, minimiza sus inconvenientes

¿Qué cualidades debe tener una buena terraza para destacar dentro de la vivienda? Tamaño y luminosidad son dos factores clave, pero no determinantes para que este espacio se pueda disfrutar por igual. Si tenemos el privilegio de disponer de una terraza amplia y luminosa tendremos un mundo de posibilidades a nuestra disposición y miles de formas de sacarle el máximo provecho al espacio, por lo que lo más recomendable es que se ponga en manos de especialistas en reformas y decoración de terrazas para que arquitectos e interioristas especializados pongan a su servicio toda su experiencia.

Si por el contrario nuestra terraza no es demasiado voluminosa o carece de luz, no tenemos que dar este encantador rincón del hogar por perdido: simples soluciones decorativas, una buena mano de pintura u otras posibilidades a considerar como aplicarle un cerramiento o integrarla en el salón pueden ayudarle a que luzca de nuevo y sacarle el máximo provecho.

Clave de cómo decorar una terraza: revitalícela

Una buena terraza debe causar sensación de confort nada más introducirnos en ella. Por ello las siguientes  claves pueden servirnos para que cobre vida un espacio del que acabaremos por convertir en el favorito de nuestro hogar:

• Use gamas cromáticas acorde al espacio y a la iluminación: Use colores vivos y alegres que dispongan de una luz de ambiente indirecta si no dispone de luz solar. Use el blanco y combínelo con otras tonalidades como el azul mediterráneo si dispone de una buena orientación hacia el sol.
• Vegetación, el estándar que nunca falla: unas plantas es el elemento decorativo de exterior por excelencia. No se limite a unas macetas, haga uso de plantas de exterior que cubran superficies por entero y juegue con otros elementos decorativos como enredaderas.
• Muebles y materiales adecuados: la madera es otro de los infalibles, pero no siempre responde bien en exteriores donde la humedad y la lluvia hacen acto de presencia. En estos casos, soluciones como resinas que imitan elementos naturales pueden proporcionar similares resultados.
• Iluminación: un buen juego de luz sirve tanto para tapar defectos como para realzar rincones. No se ponga limitaciones: use lámparas de jardín, focos, juego de luces de colores… obtenga el efecto adecuado para el ambiente ideal.

No convierta su terraza en un trastero

Por último, lo que no debe hacer con su terraza: si tiene posibilidades, no renuncie a su uso como espacio de confort y recreo. La funcionalidad de cada estancia del hogar es algo que debe potenciarse en todos los rincones: comodidad y practicidad deben cohabitar en cada habitación, y que no sólo sirvan para la función en las que se pensaron, sino que también se adapten a nuevas necesidades. Por ello, si su terraza no le sirve o no le convence como espacio para el disfrute y el descanso, no renuncie a ella: busque profesionales que puedan adaptarla a su gusto y recupérela como espacio plenamente habitable.

La tendencia general en los casos en los que una terraza o balcón no termina de satisfacer como espacio habitable es convertirla en un almacén o lavadero. No desaproveche una estancia que supone un privilegio y que, bien presentada, revaloriza el valor de la vivienda. En el caso de querer este espacio para otros usos, no dude en contar con expertos en reformas que sepan cómo sacarle provecho y adaptarla a sus necesidades.