Una terraza es un factor diferenciador: para celebrar encuentros familiares o con amigos, para desconectar, leer, tomar el sol, meditar etc. No es de extrañar que se haya convertido en un requisito indispensable para todo propietario o inquilino en busca de una vivienda.

No tener en perfectas condiciones este espacio para poder aprovecharlo al máximo es algo que no nos podemos permitir. Con la primavera a la vuelta de la esquina y con el verano en el horizonte, qué menos que valorar reformar la terraza para disfrutarla plenamente cuando llegue el buen tiempo.

Pero… ¿Cuánto cuesta reformar una terraza? Obviamente es la pregunta que nos hacemos todos. La respuesta no es tan sencilla, aunque sí que es cierto que podemos hacernos una idea si tenemos en cuenta algunas variables: los metros totales que tiene la terraza, si vamos a cambiar el pavimento, si vamos a pintar, qué elementos decorativos vamos a comprar, qué materiales vamos a utilizar, si es necesario revisar o modificar la canalización del agua o incluso si vamos a aprovechar el espacio para añadir un cerramiento.

No se puede establecer un presupuesto para reformar una terraza que sea extrapolable para todas las personas que estén valorando realizar una. Hay tantos presupuestos casi como terrazas o pretensiones de los propietarios: no es lo mismo realizar una obra parcial en la que modificaremos elementos como el suelo que hacer casi una remodelación total en la que deberemos tocar elementos estructurales.  

Es normal preocuparse antes de iniciar cualquier trámite y preguntarse cuánto va a costar. Sin embargo, antes es recomendable buscar respuestas a otras preguntas que nos servirán para acercarnos más a lo que queremos o a lo que nos podemos permitir.

Preguntas antes de reformar una terraza

¿Qué quiero conseguir al reformar la terraza?

Es tan fácil como visualizar lo que quieres y cómo lo quieres: marcarse un objetivo. Puedes inspirarte en terrazas en las que hayas estado, en revistas de decoración e incluso navegando entre hashtags por Instagram. La verdad es que tienes a tu alcance infinidad de fuentes para estimular tu inspiración. Aun así, no olvides que tu idea se debe adaptar al espacio de tu terraza.

¿Qué necesidades tiene mi terraza?

Es bueno saber tanto lo que queremos como lo que necesitamos. Es recomendable contactar con un profesional que nos lo pueda decir teniendo en mente el proyecto que queremos abordar. Una obra de estas dimensiones no puede estar a cargo de empresas que no aseguren un trabajo profesional ni experimentado.

¿En qué fechas podría tener lugar la obra?

Estaremos de acuerdo en que una obra puede ser un quebradero de cabeza. Según la distribución de la casa, puede que en la terraza lo sea menos que en cualquier otro espacio, sin embargo, igualmente también nos exigirá organizarnos. Definir objetivos y fechas clave puede servirnos para evitar contratiempos y exprimir nuestra disponibilidad.

¿Todos los materiales son apropiados?

La terraza no es una estancia más de tu vivienda: está sometida al calor, al frío, al agua, a la humedad… Está bien tener una idea definida de la decoración, la funcionalidad o el estilo que queremos para nuestra terraza; aun así, debes tener en cuenta la importancia de contar con materiales que sean resistentes y mobiliario que esté preparado para el exterior. Busca la estética, pero también piensa a largo plazo y no recortes en calidad en el proyecto.

Tu terraza, tu jardín o tu balcón puede ser el escenario por excelencia de los mejores momentos que están por venir. ¿Lo reformamos para ponerlo al nivel que merece?